domingo, 25 de abril de 2010
Mi primera web
Fue en las navidades de 2008 cuando accedí por primera vez a una página de perfiles gay. Creo recordar que fue el 29 de diciembre. No hace ni año y medio de eso.
Fueron unas navidades deprimentes para mi. Estaba nervioso, confundido. Y encima tenía que poner buena cara y fingir que no pasaba nada. Hice una gran interpretación esos días. Que gran paradoja. Una interpretación de Oscar y precisamente por eso nadie se enteró. Fui simpático, ocurrente y solícito. Parecía el más feliz de todos. Incluso me lo comentaron. Que qué bien me iba. Que se me veía radiante. Que como me envidiaban lo bien que estaba... Y estaba destrozado.
No se como llegué hasta allí. Si fue un anuncio que vi, una busqueda consciente o el azar, pero recuerdo que me planté delante de la página y pensé en echarle un vistazo. Algo así como "no pasa nada por mirar" y "serán sólo un par de minutos". Hacía un par de meses que había admitido por primera vez que era homosexual, pero aún así tuvo que pasar ese tiempo para asimilar lo que significaba. Y me faltaban todavía unos cuantos pasos para reconocerme como gay.
Pero para entrar hacia falta registrarse y crearse un perfil. Dudé. Dudé un buen rato delante del formulario vacío. Y decidí "que como sólo quería mirar" no hacía falta poner datos ciertos más alla de lo estrictamente necesario. Rellené lo básico y rescaté una vieja direccion de correo que no utilizaba hacía mucho para poder recibir el enlace que activaría mi cuenta. No quería utilizar nada que pudiera identificarme. Vívía entre la vergüenza, el miedo, el reconocimiento y la curiosidad.
Una vez dentro empecé a curiosear. Primero al azar. Leía perfiles de todas partes y miraba las fotos. Cuando alguno me llamaba la atención me fijaba de donde era. Y todos eran de sitios lejanos. Filtré entonces los datos y me centré en los alrededores del lugar donde vivo. Aparecieron bastantes perfiles. Los dos minutos que iba a estar se conviertieron en un par de horas. Miraba un perfil detrás de otro. Yo no había puesto foto ni nada que me identificase, pero miraba los perfiles con la secreta ilusión de encontrar a alguien a quien conociese. No hubo suerte, pero descubrí que había más gente de la que yo pensaba. Y que algunos estaban tan asustados como yo. Y fue entonces cuando recibí el primer mensaje.
El sonido de la recepción del mensaje me sobresaltó. No sabía si había hecho algo incorrecto, si había sobrepasado algún límite o intentado entrar en algún sitio no permitido. Lo último que esperaba en ese momento era que un desconocido me escribiese. Ni se me había pasado por la cabeza. Cuando por fin identifiqué lo que era miré el mensaje con incredulidad. Lo abrí con sorpresa y vi un lacónico "Hola". No sabía que hacer. Mire su perfil y no lo conocía de nada. Ni siquiera era de mi ciudad. ¿Por qué me saludaba entonces? Tenía 40 años pero mi comportamiento rayaba la ingenuidad total. Asombrado le respondí con otro mensaje. Hola. Nada más. No sabía que ponerle ni que decir. Pasé casi 20 minutos esperando una respuesta. Y esta no llegó.
Cerré la web con una sensación de desaliento y abatimiento. Me dije a mi mismo que ese tipo de web no era para mi. Que yo no iba a poner datos de verdad como había visto hacer a otros. Alguno ponía su nombre e incluso fotos. Para mi era inconcebible. Y además no iba a volver a entrar en ella. Porque yo no era gay.
Por supuesto entré de nuevo al día siguiente.
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Hola Parmenio,
ResponderEliminarTe entiendo perfectamente, a mi me ocurrió algo parecido. Tardé mucho tiempo en reconocer mi homosexualidad y aunque ya lo tengo superado aún no he salido del armario.
No tengas prisa, ve despacio... y no te agobies. Lo importante es que lo hayas reconocido y el hecho de entrar en una web de contactos ya es un paso (aunque no sé si lo más recomendable, eso lo descubrirás tu mismo)
Ya me irás contanto....
Un abrazo
UT
Muchas gracias Ut por tu apoyo. Se que la vida lleva su ritmo... y yo llevo el mio... que está claro que no es el mismo :)
ResponderEliminarEl salir o no del armario es una decisión personal. Yo estoy en ello. Pero porque lo necesito. Es algo que me agobia. Ya iré contando mis aventuras... y desventuras claro
Un abrazo bien fuerte
Parmenio
Gracias por leerme...!!! aunque no sé si soy el mejor ejemplo para vos... jeeeeeee... igual te doy la bienvenida a la vida... al menos te diste cuenta q sos y quién sos... ahora te toca ser feliz... verdaderamente feliz... y eso es sólo cuestión tuya... cada uno es el arquitecto de su propio destino... q tengas mucha suerte en tu nueva vida...!!! jaaaaaaa... chauuuuuuuuuuu...!!!
ResponderEliminaray madre, que esto me recuerda a cuando yo salí. Bueno, lo mio era diferente, porque yo si sabía que era gay, lo que pasa que nunca lo quise sacar de mi, es decir, asumí que jamás tendría relaciones, que jamás tendría vida... pero fíjate tu, que un día me decidí a salir, un día me cree un blog y me dije... allá voy, al mundo... y ahora estoy aquí, fuera del armario en casa, con mis mejores amigos y buscando un lugar en el mundo... se puede hacer, aunque ya te digo yo que muchas lagrimas echaras.. y te lo digo con todo el cariño del mundo, pero no te quiero engañar.. no es un camino fácil, porque aunque encontrarás gente muy buena por aquí y por el mundo, también hay otra que es para coger con pinzas, pero ¿sabes que? al final hay que conocer de todo..
ResponderEliminarTe deseo mucha mucha suerte....
Un beso cielo
Gracias a Luckitas, 30ñero gay y Alex por acercarse hasta aquí y molestarse en escribirme.
ResponderEliminarPara Luckitas:
Todo el mundo es un ejemplo para los demás. Lo único que no hay que hacer es imitar completamente a los demas para no convertirse en un calco, sino que se debe elegir lo que mejor se te adapte. Y de ti, si no te importa, cogeré la frescura, la ilusión y las ganas de vivir.
Para 30ñero gay:
Supongo que todo el mundo pasa por estas fases y a lo mejor lo que a mi me parece un mundo tu lo miras ya con una media sonrisa. Espero poder esbozar yo también esa sonrisa dentro de un tiempo. Y que os lo pueda contar jajaja
Para Alex:
Gracias por decirme que puede hacerse. Lagrimas ya he echado. Y supongo que lloraré aún más. Pero saber que hay vida más allá de los miedos me da alas para seguir.
Son pasitos que se dan poco a poco, es bonito ir viendo la evolución de la gente en los blogs. Uno en los que mejor se ve es el de Álex, porque empieza desde el principio y vas viendo como poco a poco se va superando, me quedo asombrado de todo lo que ha podido conseguir en un año de blog, eso demuestra constancia y superación. Tú también irás dando esos pasos poco a poco.
ResponderEliminarLo de los perfiles, pues yo soy un defensor de algunas páginas de contactos, porque entiendo que es como la vida real, engañarte, te pueden engañar igual que si conocieras a alguien en la calle, siempre y cuando conozcas a ese chico virtual un día cercano, si no, nada de nada. El que pone límites siempre es uno mismo, sabiendo eso, se puede ligar de forma virtual para que luego se convierta en algo real.
Besazos!!
He estado leyendo el principio del blog de Alex y hay bastantes puntos en común... incluso en las fechas. Yo espero que dentro de un año podáis decir a alguien, mira a Parmenio, llegó el último y ahora es féliz.
ResponderEliminarY las páginas de perfiles me sirven para intentar contactar con gente. No les doy más valor que el que tienen, y sirven a su finalidad. Y me he encontrado de todo... como en la realidad.
Un beso
¡Vaya fecha, parece una inocentada tardía! "La procesión por dentro" que decimos en España, y que pronto acabamos acostumbrandonos a esa esquizofrenia pues sería un sinvivir; incluso creo que con la WEB la ampliamos, ¡estamos tan a cubierto en este anonimato!
ResponderEliminarLa curiosidad mató al gato, la primera vez que me metí en un chat me salió un novio y un esclavo; y todo por que se me abrió una ventanita que sólo me decía "Hola" y, por urbanidad, respondí al saludo ¡increible lo que corre por la red! he de decir que me liberé de esa esclavitud curiosa, que duró un tiempo el chatear, aunque reconozco que sigo pillado en curiosear por blogs, me parecen menos babosos; y más racionales.
Esa esquizofrenia es parte de mi desde hace año y medio. Vivo dos vidas... y quiza no vivo ninguna... pero es lo que hay.
ResponderEliminarLa web es tu amiga y tu enemiga. Hay veces que parece ayudarte y luego te abandona a tu suerte. Pero es como el amor fou... la quiero y no puedo vivir sin ella, a pesar del daño que me hace.
Sigo mirando perfiles... de momento me es necesario para conocer gente, aunque aún no haya encontrado a la gente adecuada. Los blogs cubren otra necesidad diferente. La intelectual, el ego, la normalización... muchas.
No me hagas mucho caso, que son las 6 de la mañana y me voy a acostar ahora ;)
Un beso
jajajajaja, Parmenio, todos seguimos mirando perfiles en busca de un principe azul de beckelaur pero al mío se lo han comido como las galletas, a lametones encima :P
ResponderEliminarNo pasa nada, siempre nos quedará xtube, jajajaja.
Demasiadas cosas pasan en la vida de todos y de cada uno. Depende de la historia personal y del entorno. Felicito a los más jóvenes porque hemos conquistado espacios para que el disfrute del cuerpo y la sexualidad de cada quien signifique más que letras o palabras vacías. Quienes ya no somos tan jóvenes sólo nos queda disfrutar los nuevos aires de libertad.
ResponderEliminarNo me permitieron (y lo permití a medias) disfrutar del sexo y la sexualidad. Desde adolescente luche por ser yo, perdí amigos, familia, trabajo, bienes, destruí ilusiones y proyectos. Y debo confesar que pocas veces fui 'feliz' cualquiera fuere lo que se entienda por ello, hoy estoy solo pero no me siento infeliz. Sólo que no puedo despojarme de lo que la sociedad impone. para bien o para mal, es lo que vivo y supongo que a más años, menos posibilidades. Me hace bien ver cuánto ha cambiado el mundo y ver a jóvenes amarse sin demasiados tapujos. Vale la pena lo vivido y vale la pena seguir viviendo.
A mi nunca me ha dado asco que los príncipes estén ya catados por otros, Z. Mientras hayan dejado un poco para que pueda disfrutarlos ya me vale.
ResponderEliminarY sonará ingenuo, pero no conocía esa página de Xtube. Ahora sí.
Un beso (azul pero no pitufo)
Te pasa un poco como a mi Anónimo. Me encanta ver a los chavales jóvenes disfrutar de ser como son sin tener que esconderse. Incluso me emociono a veces. Yo no pude tenerlo, pero me alegro de que ellos al menos si lo puedan tener.
ResponderEliminarNo se tu edad pero por lo que cuentas has tenido que luchar mucho en tu vida por defender ser como eras y no plegarte a una sociedad castradora. Yo no lo hice. Incluso fue peor, porque me lo oculté incluso a mi mismo. Ya ves.
Dices que no eres infeliz a pesar de los sinsabores de la vida y a que estás solo. Eso es que has alcanzado un equilibrio en tu vida. Me alegro mucho. Espero poder llegar algún día hasta ese punto yo también.
Un beso (sobre el alambre)
Parménides, Parménides, me entusiasma ese filósofo, aunque mi preferido es Diógenes, pero eso es harina de otro costal. Hablemos de momentos felices, para qué ser tan ambicioso. La edad no nos impide amar, de hecho me enamoro muy frecuentementey lo que es peor (o mejor?), nunca me desenamoro. Tantos años de mimetización hacen que todos estén convencidos que soy hétero y homofóbico. Otros me tildarían de bisexual -lo híbrido nunca me resultó creíble- pero yo se que soy homosexual. He sido amado por mujeres y hombres y podría asegurar que nunca tuve sexo sin sentimientos de cariño, afecto, amor o lo que fuere eso que nos trastorna a los humanos. Socialmente pagué siempre caro mi audacia aunque nunca acepté el comercio (dinero a cambio) que todo bastardea. Los tiempos vividos hicieran que a nadie pudiera convencer de mi condición gay. Es ridueño si no triste. Disfruté siempre -viajes, deportes, acampes, escuela media, milicia, universidad- sin culpa pero evité siempre herir suceptibilidades familiares y/o sociales. Todo un arte de la adaptación. Tuve momentos felices y grandes enamoramientos. Hoy ya no es posible porque mi vida está demasiado ordenada y dedicada a lo profesional. Entre adultos es más difícil ligar. Y no creo en amores asimétricos, eso fue en la Grecia ámbito de la educación. Ahora es poco recomendable, al menos a mi entender. Tal vez por aquello de que si se acuesta uno con niños amanece ya sabes cómo. Para colmo de males, ahora todos me parecen niños... y muchos se acercan justamente a pedirme consejo, opinión, una respuesta a sus problemas... mal negocio eso de madurar y que tantos te confundan con sabio...
ResponderEliminarSin agregar que los jóvenes creen el mito que los mayores estamos exentos de calenturas, cuando en realidad es la época en que más nos invaden las ganas, la necesidad y nos gana -a menudo- la soledad.
Me alegro por ti, y espero que encuentres el gran amor de cada día, que para ser grande debe ser debidamente correspondido.
Gracias por responder mi comentario. Es un viento fresco que reconforta el alma. Y por el beso. Estoy convencido que para resucitar uno debe recibir un beso, espero que así sea o no habrá resurrección.
Un abrazo amistoso y un beso de humanidad.
Disculpa por lo de Anónimo, pero soy ave de paso. Lo virtual no me seduce tanto y mi asiduidad presente es parte del receso de verano. Las vacaciones se prestan para días intensos y noches laaaarrerrgggaaaasssss. Y entre tanto trajín sin destino, gente sin horarios y ese mundo al revés (al menos para uno) es fácil recorrer la web y toparse con gente simpática como tú y los amigos que se suman. Para mí es tiempo de lecturas, filmes, escribir algo y ver cómo el mundo cambia y mejora; el mundo es una forma de decir, la gente, las nuevas generaciones y este entorno comunicativo tan fácil, intenso y fugaz.
ResponderEliminarSi logran anclarme elegiré un nombre y recorreré circuitos que ahora sólo son menciones. Gracias nuevamente y cuídate.
Bueno, en realidad mi anónimo amigo, mi alias se refiere más a Parmenio, el general macedonio amigo de Alejandro Magno y ejecutado por él que al filósofo griego. Aunque paso la mayor parte de mi vida filosofando como Parménides y no guerreando. En cualquier caso, como bien dices, esa es otra historia.
ResponderEliminarA mi también me considera casi todo el mundo heterosexual, pero no porque me escondiera y disimulara, sino porque porque yo mismo me lo creía. Ahora que he descubierto que soy homosexual me queda la dura tarea de empezar a vivir con esta nueva condición. Yo también tenía mi vida ordenada y programada. Con una vida profesional enfocada y perfectamente estructurada. Ahora mi estado mental ha hecho saltar todo eso por los aires y debo replantearme todo de nuevo.
Yo por desgracia nunca he amado. A lo máximo que he llegado a sido a un cariño suficiente. Pero poco más. Ojala un día pueda disfutar de ese sentimiento, pero de momento me conformo con una buena amistad. Ya ves que poco exigente soy.
Y no tengo problemas con los amores asimetricos como los llamas. Aunque depende de la asimetría claro, porque he estado con alguno de 40 más infantil que un adolescente y con gente joven con la cabeza muy bien amueblada. Por eso creo que depende más de la persona que de la edad.
Disfruta de tus vacaciones estivales mientras aquí nos arrastramos bajo la niebla y temperaturas heladoras. Al menos uno de los dos puede disfrutar de los calores, externos e internos. Y si tienes más tiempo libre y algún día te apetece volver por aquí de nuevo bajo una personalidad no anónima, que sepas que serás bienvenido.
Un beso (asimetricamente perfecto)
Aún sigo por este barrio, y sí, con un día de verano, es tarde ya y me solazo en la vereda tomando jugos frutales, la notebook y algo de música relajante. Un barrio de clase media enmarcado en montañas y con una brisa fresca para los lugareños, aunque para mí es verano.
ResponderEliminarSi de Parmenio se trata y de los guerreros de aquellos tiempos hay tanto o más para recordar, admirar y hasta envidiar, aunque no estoy muy convencido de las supuestas bondades de los tiempos antiguos.
Y seguro nos reencontraremos porque mi vida agitada tiene muchos recovecos para sacar al sol y evitar los fantasmas. He vivido tiempos tormentosos y puedo considerarme sobreviviente, un luchador por destino más que por elección, si admitimos el destino, claro.
Aún entre luchas, inconformismo, rebeldías y transgesiones, me di tiempo para vivir mi vida según quise y pude -puedo- y nunca renuncié a mi sexualidad y pagué alto precio por ello.
Amé, amo y amaré, espero que hasta un par de horas luego de morir. Y si hay vida después, seguro no será sin amor. Quiero y cuido mi cuerpo, lo respeto y admiro, y no quisiera terminar de manera que algo lo despedace por ser un excelente compañero, aliado y cómplice. Lo que no termino de entender es por qué las mujeres se empecinan con quienes no las preferimos, e insisten en enamorarse a tiempo y destiempo.
En cuanto a los jóvenes -adultos jóvenes- ya sabemos de sus atropellos, urgencias y exigencias. Más en estos tiempos en que el amor homo parece seducir con más fuerza. Ya no lo busco, es decir, ya no salgo de cacería, sólo acepto lo que la vida pone en mi camino, sin ambiciones, ansias ni voracidad. En calma, disfrutando los detalles y siendo lo más y mejor humano posible. Claro que una cosa es el intelecto y otro el cuerpo que sigue encabritado tal vez por haber pasado ya el mediodía. Y mientras el cuerpo exija y las circunstancias lo permitan, hay que hacer frente a la realidad.
Un abrazo y un beso desde el verano aunque amo el invierno!!!!
Por lo que cuentas, Anónimo del cono sur, has vivido como has querido y no te arrepientes de nada, a pesar de las dificultades que la vida te ha puesto por delante, y que intuyo que no han sido pocas. Ahora has llegado a una edad (indeterminada) en que has logrado una estabilidad laboral suficiente que te permite el lujo de disfrutar de la vida. Ya no sales de caza como dices, pero más que nada porque has cazado suficiente en tu vida para que el juego de depredador te aburra ya. Ahora te asientas sobre tu peña y dejas que las presas sean las que se introduzcan en tu boca. No es un mal plan, no jajaja
ResponderEliminarYo en cambio como no he disfrutado de las delicias de la cacería con los músculos jóvenes ahora tengo que descubrir como puedo hacerlo a pesar de mis huesos cansados. He renunciado al ansia de la juventud, más que nada por imposible de saciar, y lo he sustituido por la paciencia del ojeador. Pero aún así, mis torpes maneras espantan a la mayoría de mi presas. Así que dedico mi tiempo al blog que al menos está ahí siempre que lo necesito.
Un beso (con bufanda y sin caipiriña)
Claro que del cono sur, argentino para pesar de muchos y orgullo propio, y en aquella atontada adolescencia imaginé que treinta años era una eternidad, me prometí viajar, viajar y viajar hasta los treinta para luego plácidamente esperar al barquero en paz. Error! La vida a los treinta se pone mucho más interesante! Total que las responsabilidades, amigos, trabajo y salidas hicieron menos viajero esas décadas. Pero antes recorrí alegre, intensa y apasionadamente todo América del sur. Del Amazonas a los Andes, del canal al extremo continental. Muchos kilómetros y muchas emociones. Muchas personas y muchas historias, todas conmovedoras, interesantes. Mucha calidez, tanta que aún hoy deja sentir el calor. Todas rebeldes, transgresoras y siempre discretas. Dos niveles siempre. La vida social que las normas imponen vividas muchas veces al filo; y la de los afectos y la piel, a veces desgarradora por su ntensidad otras por su fugacidad. Siempre vivo.
ResponderEliminarHe pasado la mitad de un siglo y no tengo apuro por marcharme, aunque intensa mi vida ha sido ordenada como corresponde a un estudiante de las recordadas escuelas privadas de varones con disciplina prusiana (de verdad), uno que ha terminado la milicia como Dios y la Patria mandan (AOR aspirante a oficial de reserva) y ha transpirado y se ha duchado seguido como integrante de equipos deportivos (atletismo) del Estado.Los claustros universitarios te mantienen joven y feliz (ejhem, digamos algo así). Qué puede pedir uno a la vida cuando a llegado (casi) a la mitad?
Nunca se tiene todo a la vez, miro vuestra nieve y deseo esas noches de viento y copos, strudel de manzanas, chocolate caliente y el hogar encendido! O el café intenso en las mañanas, croissants y más café recién molido, intenso, amargo. Reconfortante!
Parmenio, este diálogo me seduce y me entusiasma. Gracias!!!! Me gustan tus imágenes y me estimulan tus relatos. Creo que me anotaré para seguir tus derroteros. Fracias de veras! Un abrazo, un beso de caminate y disfruta el frío!!!!!
Ya intuía por pequeños detalles que eras argentino a pesar de que tu estilo de escritura más parece español que de allí.
ResponderEliminarPor lo que cuentas has tenido una buena vida y que has sido un gran viajero. Yo empecé tarde (como todo en mi vida) pero una vez que descubrí el placer del viaje se convirtió en una adicción para mi sólo limitada por el problema económico. Me encantaría perderme por toda sudamerica durante unos meses y disfrutar desde la Patagonia hasta el canal de Panama de todo lo que ese continente tiene para ofrecer, desde los paisajes hasta su gente.
Me ganas por unos años (no demasiados por lo que dices, quizá un década) y admiro la serenidad que se desprende de tu escritura. Has viajado y has conocido gente, has disfrutado del deporte y la educación. Esa escuela prusiana y el ejército posiblemente forjaron tu caracter, no se si para bien o para mal, pues los sistemas educativos demasiado rígidos pueden fomentar las virtudes o hundir los caracteres. Pero sobre todo creo que has vivido. Con mayúsculas. Porque mucha gente cae en la rutina de la comodidad y la molicie y no disfruta del tiempo que tiene.
El ser humano es un inconformista que anhela lo que no tiene y que cuando lo consigue abandona por otro sueño. A ti te gustaría nuestro frío y la niebla que cubre el rio tras mi ventana y a mí me gustaría el cálido sol sobre mi pecho y sentir un granizado refrescando mis ideas. Pero si estuvieras aquí te cansarías de los días sin sol y de ponerte excesiva ropa. Y yo me quejaría del calor agobiante que me impide dormir y de los mosquitos que no dejan de revolotear a mi alrededor. No tenemos remedio ;)
Encantado de verte por aquí. Vuelve cuando quieras y si te apetece ya sabes donde está mi correo electrónico.
Un beso (entre la niebla)