jueves, 8 de julio de 2010

Una extraña fijación


Empecé a fijarme en él cuando era pequeño. Me gustaba mucho y pasaba las horas mirándolo. Siempre estaba ahí y cuando pasaba lo ojeaba de reojo. Me daba vergüenza acercarme y siempre lo atisbaba desde lejos.

Cuando hablaba con los amigos notaba que la gente lo consideraba algo extraño. Se reían de los que les gustaba. Y las bromas eran frecuentes. Yo también me reía y hacía chistes porque no quería parecer diferente. No quería que se metieran conmigo ni que que fuese el blanco de todas las bromas. El instinto de supervivencia en esas edades se impone al coraje de reconocer lo que nos gusta.

En la adolescencia fue a peor. Era algo que no se podía contar sino querías quedar fuera de la vida social. A los que se dedicaban a "esas cosas" los marginaban y nadie les dirigía la palabra. Era el ostracismo total. Y eso con suerte, porque podían meterse contigo siempre que quisieran. Y no había nadie para defenderte. Porque todo el mundo lo consideraba "extraño".

Si te atrevías a confesárselo a un adulto te decían que lo mejor era dejarlo. Que eso no llevaba a ninguna parte. Que mejor que fuese como los demás chicos y saliese por ahí los sábados a conquistar chicas. Y claro, yo les hice caso. Salía por ahí y me reía con los demás. Pero a veces me escapaba para poder quedar los domingos temprano y estar toda la mañana.

Me encantaba. Disfrutábamos los dos y cuando terminábamos, ya agotados, solíamos beber algo y volvíamos a recordar cada momento.

Cada vez me gustaba más y quería estar más tiempo practicándolo. Me llegó a obsesionar y cuando se lo contaba al sacerdote que era mi tutor en el colegio se escandalizaba y me decía que canalizase mi fogosidad en los estudios y no en "eso".

Con veinte años la vida me enseñó que si quería triunfar era mejor apartarse de esas prácticas. Y lo dejé. Me dedique a conseguir lo que se esperaba de mi en la vida mientras lo arrinconaba en mi corazón.  A veces pensaba en él y añoraba los buenos tiempos que pasé. Las risas, el llanto, la alegría y la frustración. Lo echaba de menos pero no me atrevía.

Pasaron muchos años antes de que me diese cuenta de que me había equivocado. Y con cuarenta años volví a él. A disfrutar de su tacto. A madrugar con ilusión para dedicarle unas cuantas horas.

Ahora ya no me escondo. Si alguien me pregunta lo digo sin rubor. Ya no lo oculto y no me importa lo que piensen los demás. Soy como soy, me enorgullezco de lo que me gusta y lo proclamo cuando hace falta:

Sí, me gusta jugar al ajedrez.

28 comentarios:

  1. Jajajaj, me ha encantado, nos has dejado en vilo hasta el final, bribón, jajajaj, es una buena metáfora para entender que hay cosas que hasta que uno no sabe lo que quiere, no se pueden decir abiertamente, con seguridad, porque ese eres tú y forma parte de ti. Si no fuera así, no serías tu, aunque los miedos son totalmente entendibles, todos pasamos por eso.

    Besazos calurosos!!!

    ResponderEliminar
  2. Jajajaja, que weno, pensé que hablabas del fútbol, por que lo asociaba más con los domingos por la mañana y beber, muy ingenioso.

    Bicos Ricos

    ResponderEliminar
  3. Si querais dejarnos descolocados hasta el final lo has conseguido jajajajajajaja. Haces bien disfrutando de tus aficiones.

    Besos lúdicos.

    ResponderEliminar
  4. A veces una metáfora es la mejor forma de que se entienda lo que uno quiere decir davichini. Cuantas inseguridades se tienen en la adolescencia y cuan complicado puede ser aceptar que te gusta una cosa que a los demás no.

    Me alegro de que te haya gustado :)

    Un beso (metafórico)

    ResponderEliminar
  5. :) Igual ya no es tiempo para decirlo; salvo lo del ajedrez :P A fin de cuentas mientras tú puedas hacer tus partidas y estés bien con ellas.

    Leyéndote he recordado que la mayoría de cosas que pasan es por eso; por saber que mas que lo que eres, te une a otros lo que no eres, lo que se considera inapropiado, extraño... Hummmm, ese instinto de supervivencia yo nunca lo tuve; ese voy a hacer lo que se espera de mí; y nooo sé por qué, en fin

    besos

    ResponderEliminar
  6. jajajaja Veo que has pillado el sentido muy rápido Pimpf. Cada uno asocia los domingos a sus aficiones... y yo hasta en eso era raro ;)

    Pero mis cervezas y mis tapas no me las quitaba nadie jejeje

    Un beso (dominguero)

    ResponderEliminar
  7. jajajaj Cuantas cosas se ocultan tras las palabras Christian. Más de las que parecen. Ahora lo disfruto más que nunca... aunque tenga menos tiempo para disfrutarlo.

    Un beso (descolocador)

    ResponderEliminar
  8. Somos un animal social AntWaters, muy gregarios y que necesitamos la aceptación del colectivo. Al menos la mayoría.

    Ajedrecisticamente salí del armario como adolescente y eso me creó una fama de "rarito", pero lo asumí perfectamente. Pero no asumí otras facetas de mi vida... así que he tardado unos cuantos años más en librarme de ese sentimiento de ser igual a todos.

    Qué envidia me das por haber sabido librarte de esa presión social desde joven...

    Ahora juego al ajedrez y lo paso bien... y a otros juegos también ;)

    Un beso (superviviente)

    ResponderEliminar
  9. Llamalo intuición pero me suponía algo así. Que idiotas que somos de niños, verdad? Lo que me sorprende es que un sacerdote te dijera que canalizaras tu energia por otros lados, porque el ajedrez es algo que normalmente suele gustar que un niño juegue. En fin, que cosas pasaban.

    Mia que te has liberalizado. Asumes que eres gay, lo cuentas, vuelves al ajedrez, jajajaja.

    Un besote cielo

    ResponderEliminar
  10. En realidad este post tiene un sentido metafórico Alex. Una mezcla entre mi pasión por el ajedrez y mi homosexualidad.

    Con el ajedrez "salí del armario" con 15 años y fui capaz de asumirlo y vivir siendo el chico raro que a veces se iba a dormir temprano los sábados por la noche porque había campeonato de ajedrez los domingos por la mañana. Sin embargo con la homesexualidad no pude ni siquiera admitírmela a mi mismo. Son dos caras de una misma moneda.

    En este post especulaba con que habría pasado si hubiese aplicado mi "no admisión a ser gay" al ajedrez. Habría sido otra cosa que me habría perdido de mi vida.

    Un beso (al rey)

    ResponderEliminar
  11. el ajedrez me gustaba de pequeño... y tuve la suerte de tener padres y amigos que les parecía bien. No tenía pasión por ello pero si una ligera afición y jugaba de vez en cuando... ouf cuantos años de aquello...

    mi verdadera pasión era querer ser bailarín... pero vamos de eso ni hablar... (que en la mente de mi padre era sinonimo de marica plumifera y el antes muerto que con hijo maricón) ya ves con el tiempo yo salí gay de todos modos y a mi padre cuando lo supo tampoco le importó tanto... en fin
    yo sigo en mi armario danzarín que ya es tarde para salir de allí :-/...

    he llegado a conformarme con bailar en los bares... (aunque me he encontrado un "marido" poco bailarin y ya me falta práctica)

    cuando era más joven... con más confianza y menos vergüenza (y mejor cuerpo tb todo hay que decirlo jajaja) solía subirme a las baras a bailar (y desnudarme jajaja) supongo que encontraba salida un ahogado deseo de bailar ante un público

    mejor sin complejos... me alegra que recuperes el "ajedrez" en todos sus sentidos
    A2-C3 Besos

    ResponderEliminar
  12. ¡Hola Parmenio! Tienes un regalito en mi blog...

    http://apoyolgbt.blogspot.com

    ¡Espero que te guste! ;)

    Un besote!!!

    ResponderEliminar
  13. Pues puestos a juntarlo todo:¡Jaque a la reina!

    Estupenda entrada.

    ResponderEliminar
  14. haa me encanto esta entrada! yo soy muy malo en el ajedrez, quiza por que no pienso nunca las cosas y me dedico atacar atacar y yo termino jake meteado joo.

    ResponderEliminar
  15. Nunca es tarde para recuperar esa afición Adrianos. Yo de pequeño imitaba a Gene Kelly en los musicales y me subía por las farolas cantando bajo la lluvia... pero me di cuenta de que había patos que se movían más armónicamente que yo jajaja... y lo dejé

    Aunque tengas un marido que no baile demasiado da igual, da rienda suelta a tus fantasías bailarinas y hazte el amo de la pista ;)

    Si algún día nos conocemos en persona yo juego contigo al ajedrez y tu bailas encima de la barra del bar jejeje

    Un beso (dancing in the dark)

    ResponderEliminar
  16. Muchas gracias por el premio Fernando, que me hace mucha ilusión. Y sobre todo por tus palabras, que me han gustado mucho.

    Ya escribiré un post sobre el premio como marcan las reglas :)

    Un beso (dorado)

    ResponderEliminar
  17. Uno: Más bien es la reina la que me ha tenido en jaque a mi todos estos años... ¡¡¡pero ahora soy el rey!!!

    Un beso (a todas las piezas)

    ResponderEliminar
  18. Yo sólo ataco en el ajedrez Pancho, que en la vida real soy más bien timidillo tirando a cortado :)

    Así que envidio ese espíritu atacante tuyo. Espero que algún día encuentre a quien sea capaz de acorralarme sentimentalmente y me haga jaque mate jejeje

    Un beso (a la defensiva)

    ResponderEliminar
  19. Si sí el ajedrez, ahora se llama así ;-)
    Me encantó como lo cuentas, yo soy todo un zote con el ajedrez, tendrás que darme clases ;-)
    Voy a ponerme al día con tu blog, me voy ahora al orgullo con un chico de provincias.
    Bsote juguetón.

    ResponderEliminar
  20. Cuando quieras Alforte, te doy todas las clases que necesites jajaja

    No te atrangantes de lectura atrasada que no es bueno ;)

    Bienvenido de nuevo

    Un beso (y un cóctel de bienvenida)

    ResponderEliminar
  21. No me extraña que lo escondieras, cari... es que tu ibas para intelectual, que eso es lo peor, casi peor que ir para gay, cari, jaja. Tengo que decir que algo me olía, aunque no que te referías al ajedrez, pues este esquema lo sigo yo mucho... ¡hasta la sorpresa final! jajaa, lo del tacto me tenía confuso, pq gozarla en la berza tocando a un alfil, pues como que no lo veía, pero algo si que esperaba, jaja

    En fin, cari, que tenían razón los curas: "deja esas prácticas nefandas, que te van a salir granos" jajaja


    bezos.

    ResponderEliminar
  22. Es que mis debilidades son más fuertes que yo, Thiago. Intenté evitar eso de convertirme en intelectual, pero ya sabés, a veces los vicios se convierten en adictivos y no puedes controlarlos.

    Ahora llevo tres días sin consultar el Maria Moliner ni leer una obra de Sanchez Dragó y tengo el mono. El psicólogo me ha recomendado que diga cosas com "mola mazo", pero cuando se lo dije a mi jefe sobre el último proyecto me miró raro. Pero lo superaré ;)

    Veo que no te engañé ni por un momento... y es que me llevas tres años de experiencia blogosférica y aún más (imagino) de habilidad escritural. Cuando sea más mayor quiero escribir como tu jajaja

    Ya te explicaré yo algún día lo que se puede hacer con un alfil jejeje

    Un beso (con granos)

    ResponderEliminar
  23. je,je.... mira que eres.... cabrón! con lo mal que lo estaba pasando leyendo y sintiendo tu angustia...je,je.

    Yo de vez en cuando echo una partidita con una amiga pero soy tan malo que cada dos por tres tiene que estar corrigiéndome... pero aún así es un juego que me llama mucho la atención.

    Espero que Dios no te castigue por ello...jaja

    Un beso

    UT

    ResponderEliminar
  24. jajaja lo siento UT ;) ...pero es que el ajedrez me ha hecho sufrir mucho... la de copas que he tenido que pagar por su culpa...

    Es curioso como cambiando sólo una palabra de la historia se convierte un drama en una sonrisa...

    Y más curioso es ver como se es capaz de asumir el desdén de la gente por practicar "algo" y no ser capaz de asumirlo por practicar "otra cosa". Aún le doy muchas vueltas a este pensamiento.

    Entretanto espero que, como bien dices UT, Dios no me castigue por este pequeño juego dialéctico y considere que ya he pagado con mi adolescencia hetera.

    Un beso (de verdad)

    ResponderEliminar
  25. El caso, cari, es que tengo un post escrito que ahora no puedo poner... es que tú ya eres como EL PAIS, que me lees los post, los borradores e incluso la mente, jajaaj

    Este recurso lo utilicé no hace mucho en mi post CASTRACIÓN, ahora tendré que dejar pasar un tiempo, jaaja Bueno, la verdad es que si te fijas, en los blogs todos nos alimentamos los unos sobre los otros... Es como hoy , todos hablamos del mundial. en fin, que ya se sabe...¡todo es política! jajaj

    Bezos.

    ResponderEliminar
  26. Es que en realidad tu no lo sabes, pero no sólo El Pais o yo tenemos acceso a tus borradores y tu mente... en realidad lo tiene todo el mundo, porque eres el protagonista de "El show de Thiago", que se retransmite directamente en este canal desde hace tres años jajaja

    Es cierto que existe esa retroalimentación bloguera. Ahora estoy escribiendo un post inspirado en uno de Pimpf por ejemplo... y no, no es del mundial ;)

    Un beso (desde tu mente)

    ResponderEliminar
  27. http://gaynewsingreek.blogspot.com/2010/08/si-nos-dejan.html


    me recordó a este relato tuyo jeje

    ResponderEliminar
  28. ¡¡Fantástico Adrianos!! Me ha encantado. Es de lo mejorcito que he visto en vídeos de temática gay. Me encanta como sólo visualmente toca los temas hetero-gay, juventud-ancianidad, sentimientos en público... y además mi ajedrez :)

    Un beso (sin enrocarme)

    ResponderEliminar